¿Soy friki?

Le pregunto a mi reflejo en el espejo mientras intento que la camisa me quede bien si la meto por dentro. Después de muchos intentos me sigo pareciendo a Patito en los Juegos del Hambre, así que decido que va por fuera y a tomar por saco. La pregunta me sigue arañando por dentro mientras voy hacia el trabajo. ¿Soy friki? Según la gente que me rodea (y no me entiende) sí, lo soy.

Hace unos días, durante la hora de la comida en el trabajo, hice un comentario sobre hacer un viaje a Japón. Entonces empezó el debate: ¿eres friki? Preguntó alguien. Y yo un poco dubitativa respondí: ¿friki de qué tipo? Ni siquiera sé por qué lo dije. Tal vez esperaba que matizara un poco más su respuesta. Es bien sabido que Japón es el centro neurálgico de otakus y gamers que sueñan con visitar el barrio de Akihabara alguna vez en la vida. Por otra parte, también lo conocemos por cantidad de cosas esperpénticas que tienen los japoneses, como aquellas máquinas expendedoras de ropa interior (que para mí esto sí que es de frikis).

Casi no hizo falta que contestara, otra compañera lo hizo por mí: Sí lo eres. No fue despectivo, simplemente era un hecho. Lo dijo porque sabe que llevo la Nintendo 3DS todos los días en la mochila. Aquello abrió la veda: casi una hora de conversación sobre videojuegos. Vi caras de nostalgia: de aquel que tenía la Nintendo 64 y aquel otro que se tiraba hasta las cuatro de la mañana en el Counter Strike. Con esto comprobé que algunas personas habían jugado a videojuegos durante algún momento de su vida, pero que ahora es un recuerdo de infancia/adolescencia al que nunca volverán porque han evolucionado.

Los videojuegos deben ser una de esas cosas que dejas de lado cuando te haces mayor, ¿No? De otro modo es que eres friki. Para mí, los videojuegos son una afición más como podría ser el deporte, la lectura o aprender a cocinar. Pero esto otro no es friki. Pero, ¿Qué es friki? ¿Quién decide qué es friki o qué no lo es? ¿Si eres friki no eres normal? ¿Por qué si juegas al Fifa no eres friki y si lo haces al Final Fantasy, sí? Conozco personas que juegan en mayor o menor medida y personas que trabajan en este sector. Y también conozco personas que no tocarían una consola ni con un palo y tienen otro tipo de rarezas.

Para mi fortuna, el hecho de ser catalogada como friki no es algo malo, sino que dice algo más de mí. Y las personas que me conocen, aunque no lo entiendan, tampoco lo critican. La verdad es que he tratado de explicarlo muchas veces, pero habrá cosas que no cambien y mi madre siempre me dirá “que salga más y deje de darle a la tecla”. Habrá personas que sean más susceptibles a estos comentarios y sólo esperarán a entrar en las tiendas de videojuegos/ cómics/ merchandising a refugiarse en su Sancta Sanctorum y poder ser como verdaderamente son. Yo misma me he sentido cómoda dentro de estos establecimientos, y no, no hay ratas de biblioteca ni dependientes como el de La mazmorra del androide de Los Simpson. Son personas normales y ya está.

Yo estoy contenta de ser como soy, friki o no. Total, la etiqueta ya me la pongo cuando tengo que ponerme una camisa que no hay forma humana de que me quede bien por dentro para ir a trabajar.

Photo by James Pond on Unsplash

Una respuesta a “¿Soy friki?”

  1. ¡Hola Terduki! Primero presentarme, pues es la primera vez que paso por tu rinconcito (muy chulo, por cierto, por lo poco que he visto). Y respecto al tema, siempre he sido de la creencia de que cada persona es friki de algo. Algunos son frikis del deporte, otros de las compras compulsivas, otros lo son de los libros, algunos, lo son de la política, etc. Por lo tanto, definir a alguien como friki (sea de la manera que sea) no creo que deba ser solo en un ámbito concreto.

    Yo llevo toda la vida con la etiqueta, si, lo soy, y a mucha honra. Creo que siempre seré así, pasen los años que pasen y la verdad, es que ser así me gusta.

    Gracias por pasarte por mi cueva, y muy contento de conocer tu rincón, un saludo 🙂

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